JOHN MAXWELL & LA ACTITUD: LA LEY DE LA MANZANA PODRIDA
Cuando se inicia un emprendimiento tanto tradicional como online, o bien formas parte de una organización, para que marche bien y se obtengan resultados positivos como se espera, no puedes pretender ser el típico llanero solitario, porque simplemente, si quieres hacer las cosas bien, no puedes hacerlo solo. Por eso, siempre es una buena práctica incentivar el trabajo en equipo.
No obstante, también es cierto que aunque consideres que cuentas con el mejor equipo del mundo, nadie… ni el más experto directivo, por muy «blindado» que parezca, está exento de que se cumpla de una forma u otra lo que John Maxwell denomina La Ley de la Manzana Podrida.
Las malas actitudes arruinan al equipo
La actitud… esa forma de actuar que caracteriza a un individuo y en cierta manera nos diferencia a unos de otros, puede catapultarte en el camino hacia el éxito o hundirte irremediablemente en el fracaso.
Yo podría catalogarla como la «Manager y Relacionista Público» del yo (ego) verdadero.
Como una planta, tiene raíces internas (las cuales, por supuesto, no vemos), pero sus frutos y flores son externos, visibles al entorno.
Puede ser tu mejor aliada o tu peor enemiga. Sí, tal cual como lo lees: Tu peor enemiga, al punto de cavar tu propia tumba sin que siquiera lo notes.
Esa señora, la actitud, es más sincera que tus palabras.
Es tu imán: puede atraer o repeler a las personas en tu vida.
Es la vocera de tu presente: habla de ti y de quien realmente eres sin pronunciar una palabra.
Es profeta de tu futuro: tu actitud hoy podrá perfectamente «vaticinar» dónde y cómo estarás mañana.
De acuerdo a Maxwell, las actitudes tienen el poder de levantar o derribar a un equipo; es decir, no eres triunfador o vencedor porque eres inteligente o porque tengas algún talento, pues lo que realmente determina tu éxito o fracaso es tu actitud, no tus aptitudes.
Ahora, ¿qué componentes hacen que el resultado de la fórmula Habilidad + Actitud sea positivo o negativo?
Te lo explico de esta forma:
Una actitud se contagia cuando se exhibe ante otros
Al igual que el bostezo o la risa, la actitud se contagia. Si tú como líder de un equipo enfrentas cualquier circunstancia adversa en un momento determinado, entonces imitarán esa cualidad tuya, sirviendo de inspiración y aliento al resto de tus compañeros.
Las malas actitudes se contagian más rápido que las buenas
No hay nada que se contagie y propague más, pasando, incluso, por encima de una buena actitud que una MALA ACTITUD y con ella toda su vibra y animosidad negativa.
La mala actitud no hace a nadie importante, al contrario, perjudica tanto a la persona que la tiene como a quienes interactúan a su alrededor, aísla. Consciente o no de todo lo que una mala actitud trae consigo, es una carga de emocionalidad y reacciones negativas. Toda persona que recurrentemente presenta una mala actitud, igual de mal acaba.
Las actitudes son subjetivas, por tanto, puede ser difícil identificar una mala.
Una persona con mala actitud no necesariamente signifique que está haciendo algo malo, pero sí está sin duda, dañando a todo equipo del cual es parte.
Un individuo (hombre o mujer) proyecta lo que es y sienten internamente. Su actitud habla de lo que es realmente. Se traduce simplemente en la manera en cómo actúa.
Aprendiendo a identificar a La Manzana Podrida
¿Cómo saber cuándo estás frente a una «manzana podrida» que pudiese arruinar a tu equipo o dañar tu vida?
A continuación, las malas actitudes más comunes que te estarían alertando que una manzana podrida está a punto de arruinarlo todo dentro un equipo:
- Falla en disculparse
La manzana podrida es incapaz de admitir errores propios. Jamás la escucharás decir: «me equivoqué». No pide disculpas. Por lo tanto, antes que afrontar, suele dejar situaciones sin resolver o escudarse en otros para evadir culpas y fallas en sus responsabilidades.
- Envidia
La persona con actitud envidiosa, suele expresar ante los demás algo distinto a lo que en realidad siente.
Se empecina en ver el lado negativo de las cosas.
Cree erróneamente que toda persona, independientemente y pesar del talento, rendimiento, eficiencia o influencia, merece igual trato.
- Enfermedad del yo
La manzana podrida con esta actitud desarrolla la creencia de ser imprescindible. Suele ser egoísta. No sabe trabajar en equipo. Se siente «invadida» al compartir con alguien del equipo una misma tarea.
«Eso lo hago yo»«Es mi área, mi responsabilidad. No tienes por qué hacerlo tú»
- Espíritu crítico
Aunque este término tiene dos aristas, John Maxwell, al referirse a esta actitud, apunta hacia la NEGATIVIDAD, hacia la persona quien para todo tiene un PERO, una crítica destructiva en lugar de constructiva. En dos palabras:Espíritu Criticón.
- Deseo de acaparar todo el crédito
Siempre busca ser el centro de atención. Siente necesidad imperiosa de aplausos, de reforzamiento positivo para alimentar su baja autoestima y cuando no lo logra, se victimiza ante los demás.
Si no se tienes cuidado con las malas actitudes, pueden arruinarlo todo
Las malas actitudes nacen del egoísmo y abrigan resentimiento, causan división y pueden dañar, cualmanzana podrida, al resto del equipo.
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¿Hoy sabes si cuentas con alguna manzana podrida en tu vida?
Mi moraleja de hoy para ti, como emprendedor, individuo: aprende a identificar cualquier manzana podrida que puedas tener dentro de tu equipo o en tu entorno. Reconócela y ten la voluntad de actuar y sacarla a tiempo. Las reiteradas malas actitudes son una señal irrefutable de que estás en presencia de una manzana podrida.
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¡Hasta la próxima lectura!
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